miércoles, 21 de noviembre de 2012

ZAMORA Y TORO

Hace un par de fines de semana estuve visitando Zamora y Toro (hay arte románico hasta cansaros).
Desde aquí tenéis unas 4 hs de viaje en coche. Llegue el viernes a la noche. Lo justo para dejar el coche, hacer el check in y dar una vuelta por el centro para tomar algo y cenar. Me alojé en el Hostal Bajo la Muralla que está a 5 minutos andando de la Plaza Mayor. Está bien pero viernes y sábados pasa mucha gente por debajo al ser una zona de paso entre la zona de marcha y alguna discoteca. Si os da la habitación a la calle puede molestar un poco.

El sábado a la mañana me levanté pronto, desayuné y estuve dando alguna vuelta por el casco histórico.

Monumento al Merlú en la Plaza Mayor de Zamora
Todos los sábados a las 11 hs desde la Plaza de Viriato, junto al Parador Nacional y la Oficina de Turismo, se hace una visita guiada que recorre los principales rincones de la ciudad, incluyendo la Catedral. Vale 10 € e incluye la entrada a la Catedral (que vale 4 € si vais por vuestra cuenta). Merece mucho la pena, si vais no dejéis de hacerla. Tiene una duración de 2 horas y cuenta con la participación de una guía local.
Termina en el Castillo de Zamora y con la explicación de la historia de "Zamora no se ganó en una hora".

Castillo de Zamora
Después de la visita guiada fui estuve dando una vuelta por el centro y tomando algún cacharrillo haciendo tiempo hasta la hora de comer.
Os pongo aquí algunos sitios a los que podéis ir a comer de restaurante: El Calibre en la calle Juan II, El Maestro, La Cueva en la calle Alonso de Tejada, Restaurante Rey Don Sancho en la plaza de la Marina, Restaurante Las Aceñas, Restaurante Capitol, Restaurante Serafín, Casa Mariano. Yo miré un poco por internet y me decidí por el Restaurante Serafín. Tienen comida típica de la tierra de Zamora. Os pongo la crítica que he hecho en Tripadvisor por si os animáis http://www.tripadvisor.es/ShowUserReviews-g262064-d998099-r145215470-Serafin-Zamora_Province_of_Zamora_Castile_and_Leon.html
Os adelanto lo que comí:

Arroz a la zamorana. Estaba increíble



Tostón asado. Así le llaman al cochinillo

Y que decir tiene que el menú fin de semana incluye un buen vino de la casa de D.O. Toro.
En todos los que he puesto más o menos tienen menú fin de semana y se come muy bien. Recordad que Zamora no es una ciudad cara así que aprovechad. Este menú lo tienen por 24 € e incluye postre de la casa.

Después de comer fui al hostal a echarme una pequeña siesta. A media tarde vuelta de nuevo por el centro y por la calle Balborraz hasta el Duero. Merece la pena dar una vuelta por el puente de piedra, cruzar el Duero y ver la vista de la ciudad.

Calle Balborraz que va desde la Plaza Mayor hasta el río Duero
Después de subir por esta calle justito de aliento me dirigí hacia el Parque de la Marina. Pregunté por una cervecería para ver el futbol y me guiaron hasta aquí.
Estaba jugando Osasuna con el Espanyol y vi tranquilamente la goleada de los rojillos con un par de buenas pintas.
Con el tercer gol me entró un subidón de la leche y al celebrarlo la gente que había se quedó mirándome con un careto........
Bueno, cuando acabó, me fui a dar una vuelta por la Calle Santa Clara, que es la principal calle peatonal de la ciudad, viendo alguna tienda y haciendo hora para cenar.
No me apetecía mucho cenar de plato y decidí ir de picoteo. Para ir de pinchos la mejor zona es la que llaman "los lobos". Está en el centro, no tiene pérdida, y cada bar tiene su especialidad. Os podréis encontrar pinchos morunos, patatas bravas, patatas mixtas, tiberios (son mejillones con salsa muy buenos), montaditos de chorizo asado, callos, etc.
El más típico es el Bar el Lobo, donde la especialidad son los pintxos morunos. Tienes "que si" (picantes) o "que no" (no picantes). Es unas risas cuando los piden a la cocina. A mi personalmente me gustaron más los de un bar que hay justo al lado, El Abuelo.

Pincho moruno "que no" en el Bar El Abuelo.
Hacia las 11 de la noche de nuevo al hostal a descansar porque a la mañana siguiente quería comprar algún detallito a primera hora y viaje de vuelta pasando por Toro.
Arriba para las 9 hs, ducha, hacer el equipaje y hacia la Plaza de Viriato. Desayune en una cafetería al lado del Parador Nacional.
Cerca de aquí, en la calle que va de la Plaza de Viriato hacia la Iglesia de San Ildefonso, antes de llegar a la Calle de Moreno, hay una tienda pequeñica donde venden dulces y productos típicos de Zamora. Os recomiendo que no perdáis la oportunidad de comprar medio kilito de "Aceitadas", grandes o pequeñas.

De aquí al hostal a coger el equipaje y el coche para ir hacia Toro.
Se tarda una media horita en llegar y merece la pena pasar una mañana. Lo que no os podéis perder en este pueblito es callejear, ver la Vega del Duero desde el Mirador junto a la Colegiata, el Pórtico de la Majestad que está en la Colegiata de Santa María la Mayor y el Convento del Sancti Spiritus.

Eeeeeee toroooooooooo. Muuuuuuuuuuuuuu

Os recomiendo que aparquéis en la recta de la entrada junto a la Puerta de la Corredera y os dirijáis andando hacia la Torre del Reloj, que es donde comienza el Casco histórico. La oficina de turismo está en la Plaza Mayor. Aquí os darán un planito e información de interés.
Lo primero es ir junto a la Colegiata a ver la vista de la Vega del Duero desde el mirador. Un lugar relajante. A continuación a ver la Colegiata por dentro (es gratis) y ver el Pórtico de la Majestad (1 € sin poder hacer fotos sin que te vean).

Pórtico de la Majestad. Una maravilla de policromía.
Es espectacular lo bien conservada que está la policromía desde que lo pintaron en la Edad Media. Es el que mejor se conserva de Europa. Merece la pena ver las explicaciones en dos esquemas que hay en la sala.
De aquí a las 13.30 hs es la última visita guiada al Convento del Sancti Spiritus. Vale la entrada 4 €.
Te explican todas las estancias, refectorio, capilla, claustro y museo. Os lo recomiendo.
Después de la visita, a callejear un poquito más aprovechando el solete y pronto a comer, para poder volver con luz.
Casco histórico de Toro con la Colegiata al fondo.
Y hasta aquí dio de si el fin de semana. No dejéis de visitar alguna vez esta zona olvidada de Castilla y León porque merece la pena.
Hasta la próxima.